La Inteligencia Artificial (IA) es una de las tecnologías más fascinantes y prometedoras de nuestro tiempo, que ha saltado de un escenario de promesa infinita a adentrarse en nuestras vidas de forma impetuosa, ofreciendo soluciones de todo tipo que prometen un futuro deslumbrante al mismo tiempo que incierto.
Sin embargo, no es nada nuevo. La IA ha sido y está siendo implementada en diversos ámbitos de la industria, con el objetivo de mejorar la eficiencia y la productividad de las empresas. La IA se refiere a la capacidad de las máquinas para realizar tareas que antes solo podían ser realizadas por seres humanos, como el razonamiento, el aprendizaje y la capacidad de planear. Algunos autores llegan a atribuirle la creatividad, pero es una creatividad mal entendida ya que esos contenidos nacen de patrones, nada que ver con la creatividad humana que, de momento y esperemos por mucho tiempo, no es replicable.
En la industria, la IA es utilizada para una amplia variedad de aplicaciones, como la automatización de procesos de producción, la optimización de la cadena de suministro, la mejora de la calidad del producto, la gestión de la seguridad o la prevención de riesgos laborales, entre otras muchas. Además, la IA también puede ser utilizada para el análisis de datos y el desarrollo de sistemas de inteligencia de negocios, que permiten a las empresas tomar decisiones informadas basadas en información precisa y actualizada.
Si bien la IA ofrece muchas oportunidades para la industria, también plantea desafíos éticos y sociales. Por lo tanto, es importante considerar las implicaciones de la IA en la industria y desarrollar marcos regulatorios y éticos que garanticen su uso responsable.
¿Qué es la Inteligencia Artificial generativa que ha dado lugar a la presente revolución?
Hasta ahora, la IA a la que estabamos más acostumbrados era la IA predictiva, es decir, aquella que a partir de patrones del pasado es capaz de generar algoritmos para predecir el futuro. Sin embargo, la última evolución en IA es la que se conoce como IA generativa. En este caso, y dicho de forma muy simplificada, lo que ocurre es que a partir de la información disponible, esa IA es capaz de generar contenidos nuevos. Estos contenidos nuevos no necesariamente debe ser texto. Algunos ejemplos de resultados posibles son fotos, cuadros, sonidos e incluso video, entre otros.
En este marco es donde surge la última revolución tecnológica en la materia que ha revolucionado y abierto a la sociedad todo este mundo. Nos referimos a ChatGPT. Seguramente, la gran mayoría habrá oido hablar de esta aplicación e incluso la habrán testeado. Algunos ya la estarán utilizando para determinadas tareas más metódicas.
Pero, ¿qué es ChatGPT?
ChatGPT es un sistema de chat impulsado por Inteligencia Artificial generativa. Este sistema de chat está basado en el modelo de lenguaje GPT (última versión GPT4) desarrollado por OpenAI. Esta empresa fue cofundada por Elon Musk en 2015, aunque en la actualidad se ha desantendido de la misma debido a fuertes discrepancias con la actual dirección. La evolución en popularidad de esta aplicación ha roto todos los records, ya que fue presentada el pasado 30 de noviembre de 2022 y en tan solo dos meses ha conseguido superar los cien millones de usuarios. En la siguiente imagen puede verse la comparativa en la evolución de este indicador en otras aplicaciones que le preceden en el tiempo y que en su momento fueron las más populares.
Sin embargo, y algo que hay que tener en cuenta, tanto esta herramienta como el resto de otras muchas que no llegan ni a ser conocidas, dedican cientos de trabajadores durante años al desarrollo y maduración de las mismas, no llegando a mercado en la mayoría de casos.
¿A que se debe la expectación que ha levantado?
Atendiendo tan solo a aspectos técnicos, se trata de un robot virtual con el que se puede mantener una conversación de forma similar a un chatbot, pero con una diferencia significativa. A diferencia de los chatbots convencionales, ChatGPT ha sido entrenado en una amplia variedad de contenidos, como noticias, libros, blogs y otros documentos, lo que le permite analizar y comprender grandes cantidades de información. Utilizando técnicas de aprendizaje automático y procesamiento del lenguaje natural, ChatGPT puede responder preguntas y mantener conversaciones contextualmente relevantes. La capacidad de ChatGPT para comprender preguntas complejas, mantener una conversación fluida y ofrecer respuestas informativas y relevantes, lo ha catapultado a la vanguardia de las soluciones basadas en IA generativa.
La parte más delicada por el momento es que, si bien su capacidad para proporcionar respuestas es impresionante, ChatGPT no tiene la capacidad de discernir la veracidad de la información que proporciona, ya que se basa en la asociación de palabras y la frecuencia en los textos que ha analizado. Otra limitación importante es que ha sido entrenado con información de hasta finales de 2021, por lo que sus respuestas carecen de información posterior. Existe la posibilidad de conectarlo a internet para que en sus contenidos utilice referencias más actuales.
Para aquellos que se quieran adentrar en este mundo y todavía no lo hayan hecho, la forma más sencilla es entrar en https://chat.openai.com/ y registrarse para poder acceder a la misma. El servicio es completamente gratuito, aunque también existe una opción de pago (unos 20 €/mes) que puede llegar a ser interesante según el uso que se le pretenda dar.
El gran secreto para conseguir un uso eficiente de esta herramienta es interactuar con la misma de forma óptima. Esto quiere decir hacer las preguntas o solicitudes de la forma más correcta posible mediante la redacción de un texto muy conciso. A este texto se le conoce como prompt. Esta “habilidad” de solicitud de información está muy valorada, e incluso comienza a significar una especialización profesional con bastante futuro.
Su capacidad para comprender y analizar el contexto de las preguntas y proporcionar respuestas, que se ajusten adecuadamente, ha demostrado ser una herramienta invaluable en campos como la asistencia virtual, la generación de contenido y la interacción con los usuarios en diversos entornos digitales. Es así como ChatGPT ha logrado consolidarse como una referencia en la utilización de la IA generativa, brindando soluciones sofisticadas y satisfaciendo las necesidades comunicativas de una amplia gama de usuarios.
Ejemplos de aplicaciones de ChatGPT
Las posibles aplicaciones de esta herramienta son tantas como la creatividad de los propios usuarios. Nos permite cocinar recetas para ingredientes determinados, generar dietas acordes al objetivo marcado, planes de entrenamiento, y asi hasta donde se nos pueda ocurrir. En el presente Insight el foco se va a centrar en dar algunos ejemplos de utilidades que pueden ser aprovechadas desde el plano laboral y no tanto el personal.
Por lo tanto, y desde un punto de vista del profesional, también pueden encontrarse aplicaciones de gran interés. Sin ir más lejos, hace muy pocos días, un profesor de la UJI publicó una guía de uso de chatGPT para actividades tan concretas como el marketing y la publicidad. Lo cierto es que ha tenido un fuerte impacto mediático, y en la misma se ilustran más de cincuenta prompts que van enfocados a facilitarnos nuestro día a día en esta materia. Si quieres descargarte dicha guía puedes hacerlo en este LINK.
Otra línea que también presenta gran interés es el de las aplicaciones que nos presentan resumenes personalizados de caulquier tipo de contenido, sin necesidad de tener que leerlo, verlo o escucharlo íntegramente. Un ejemplo es la aplicación Eightify.app, basada en GPT4, que genera un resumen en texto de cualquier video de youtube. Otra aplicación en esta línea es Chatpdf.com. Subiendo a la aplicación cualquier archivo en formato pdf, y una vez lo ha “digerido”, podemos realizar cualquier consulta referida al mismo o bien solicitar un resumen con los matices que se considere necesario.
Otro campo en el que están apareciendo aplicaciones realmente interesantes es en el del diseño. Como ejemplo hemos escogido Segment Anything model (SAM). Es una aplicación de código abierto, cuya principal singularidad es su capacidad de segmentar imágenes por los diferentes elementos que la componen. Algo conceptualmente tan sencillo a priori, se convierte en metódico y arduo trabajo para muchos diseñadores, los cuales necesitan horas para poder realizar esta labor con una calidad profesional. La gran novedad de la herramienta se encuantra en el “anything”, y es que puede segmentar cualquier objeto, aunque nunca antes haya sido entrenada la herramienta para segmentar el mismo. Se puede ver un video explicativo de esta aplicación en el siguiente LINK.
Por último, y en cuanto a ChatGPT se refiere, se ha contrastado como una de sus mayores virtudes la capacidad que presenta para la generación de código de programación a partir de la correspondiente descripción de lo que queremos obtener. Incluso nos puede verificar un código ya creado o traducir una rutina de un lenguaje de programación a otro concreto, sugiriendo y validando de forma iterativa los cambios necesarios en caso de no funcionar correctamente. Sin duda, una ayuda muy valorada por informáticos que se dedican a esta actividad a diario.
No todo es ChatGPT
Sin embargo, y ante el brutal impulso mediático que ha sufrido esta aplicación, no todo lo que se está desarrollando referido a IA es ChatGPT ni mucho menos. Ya han aparecido modelos similares como son Bingchat o BARD, todos ellos competencia directa, con sus ventajas y desventajas, y de los que hablaremos posteriormente. Además, podemos encontrar innumerables compañías desarrollando sus propias aplicaciones, en ningún caso vincualadas con las anteriores.
Uno de los ejemplos más conocidos es Midjourney. Esta aplicación, al igual que otras muchas, permite obtener imágenes de una gran calidad a partir de una descripción proporcionada por nosotros. Al igual que ocurría en ChatGPT, esta redacción es clave para obtener el resultado buscado. A modo anecdótico, podemos ver sus posibilidades en este reportaje realizado de una supuesta fiesta organizada por la casa real británica con motivo de la reciente coronación.
Fuente: metro.co.uk
Aquí tienes una guía para profundizar en esta aplicación.
Ya por último, nos gustaría destacar dentro de esta categoría la aplicación de reciente aparición conocida como Lovo. Lovo es un generador de audio a partir de texto con multitud de posibilidades. Se puede seleccionar perfiles de voz atendiendo a una serie de criterios (idioma, edad, sexo, etc.), se puede introducir matices a las voces como diferentes emociones, modular la velocidad y un largo etcétera de características que la convierten en una aplicación excelente para todos aquellos proyectos en los que sea necesario crear un audio a partir de un texto.
Respecto a la competencia más directa de ChatGPT
Como comentábamos anteriormente, son varias las aplicaciones con gran similitud a ChatGPT que han aparecido de forma inmediata a su lanzamiento. El impacto que esta aplicación ha causado en el público en general ha forzado al resto de empresas a lanzar sus proyectos de forma inmediata y, por los resultados, en algún caso de forma precipitada. La primera de ellas fue Bingchat. Para acceder a esta aplicación no es necesario registrarse, pero si acceder desde el navegador de Edge y entrar en la web del buscador de Bing.
Después de ChatGPT, quizás el lanzamiento más mediático ha sido el de la IA de Google conocida como Bard. El acto de presentación tuvo lugar el pasado mes de febrero, aunque resultó un poco decepcionante debido a un error en una de las respuestas dadas por Bard en dicha presentación, lo cual se tradujo en una caída de la cotización de Google superior al 10 %, además del deterioro de su imagen. Sin embargo, más allá de dicho error, se presenta como una alternativa potente, con sus ventajas e inconvenientes. En cualquier caso, todavía no está accesible en Europa.
Adicionalmente, y como no es de extrañar, la actual situación geopolítica también se evidencia en este campo, lo cual ha llevado a China y Rusia a la presentación de sus respectivas plataformas. China (de la mano de Baizu con Ernie Bot) ya lo hizo en el mes de marzo, pero tan solo respaldado por un video pregrabado, lo cual tuvo consecuencias similares a las sufridas por Google en su presentación. Respecto a Rusia, presentó el pasado 23 de abril su chatbot basado en IA bajo el nombre de Gigachat, con una arquitectura de código abierto en contraposición a la arquitectura de código cerrado del resto.
Como conclusión, y centrando el foco en la parte tecnológica, esta revolución que plantea la IA no va a ser una moda, y cada día van a ir apareciendo aplicaciones más sofisticadas, con resultados más sorprendentes, que acabarán integrandose en nuestra labor diaria tanto o más como en la actualidad lo hace la ofimática o internet. Por ello, es necesario conocer y estar al día de todo lo que aparece y, en el corto plazo, incluso formarse en aquellas aplicaciones que nos puedan facilitar nuestra labor diaria. Puede ser un grave error pensar que es una moda pasajera, o incluso sentirse amenazado laboralmente por este tipo de soluciones, dejando de lado su evolución, ya que esto si que supondrá, antes o después, una desventaja competitiva que se antoja muy difícil de superar.
Unidad de Inteligencia Competitiva del ITC-AICE
