Soluciones para la infoxicación del sector cerámico
Son muchas las inquietudes que preocupan al clúster cerámico de hoy. Desde los habituales problemas con los costes de fabricación y mantenimiento, la eficiencia operacional, la trazabilidad del producto y el copyright, hasta las más actuales como son el coste energético, la logística y la huella de carbono.
Las empresas tratan de buscar soluciones basadas en la toma de datos. Para ello se sirven de multitud de modelos de gestión tipo Lean o Industria 4.0, ayudados de innumerables softwares tales como ERP, CRM, SCADA, PLC, SGA, etc. Todo ello supone el manejo de un gran volumen de datos, inasumible para los fabricantes, bien por no disponer de herramientas tecnológicas adecuadas o bien por falta de recursos, lo que conduce a lo que hoy se conoce con el término de infoxicación, es decir, una sobrecarga de información difícil de procesar.
El 70% de las empresas españolas afirman que “los datos son un elemento vital de su organización”. Pero solo el 25% maneja los datos como un elemento capital y prioriza su análisis, y sólo el 5% toma sus decisiones estratégicas basándose en la información aportada por el análisis de datos (empresas data-driven).
Por tanto, es necesario mejorar el flujo y la calidad de la información en nuestras compañías para poder tomar decisiones más analíticas. Una tecnología que puede ser disruptiva y ayudar a la transformación digital en este aspecto, es la tecnología de cadena de bloques, conocida con el término anglosajón Blockchain.
¿Cómo surgió? Los orígenes del Blockchain
Tres han sido los pilares que han propiciado la aparición de esta novedosa tecnología. El primero, la pérdida de la confianza interpersonal, necesitad de un tercero para realizar cualquier transferencia de valor. El segundo, la pérdida de la privacidad del usuario que ha impuesto la era digital. Y, por último, la aparición de la criptografía, que ha permitido que la información sea codificada de forma segura en las redes.
¿Cómo funciona? Entendiendo la cadena de bloques
Como su nombre indica, Blockchain es una cadena de bloques. Éstos, al estar entrelazados, permiten la transferencia de datos con una codificación a través del uso de la criptografía, generando una base de datos segura, descentralizada y compartida a la que tienen acceso todos sus participantes. La Blockchain viene definida por una serie de características:
- Seguridad y privacidad. Cada uno de los bloques de datos está protegido y vinculado entre sí, lo que posibilita la participación del nodo (organización descentralizada sin jerarquía), generando un sistema distribuido. Gracias al nodo la información se verifica y añade a la Blockchain a través de un proceso de consenso (sincronizado), que es el que autoriza cualquier actualización en la Blockchain. Los datos se traducen en una serie de letras y números mediante un código hash (encriptación), que es inalterable, evitando cualquier modificación de la cadena.
- Trazabilidad y transparencia. Al ser un sistema inmutable y abierto permite visualizar las transacciones.
- Fiabilidad. Debido a la rapidez con la que se puede recuperar la información del nodo.
- Velocidad y almacenamiento. Los datos son almacenados casi en tiempo real, esto permite un intercambio actualizado y rápido de grandes cantidades de información.
Aplicaciones
La cadena de bloques surgió a principios de siglo de la mano de las criptomonedas digitales y sobre todo vinculada al Bitcoin. En la actualidad, es en el sector financiero donde tiene su uso más extendido. Prácticamente la totalidad de los grandes grupos financieros realizan transacciones basadas en Blockchain. Pero esta tecnología tiene mucho recorrido y muchas otras aplicaciones, por lo que cada vez son más los sectores que la están incorporando.
Es significativo el impacto obtenido en la gestión de la cadena de suministro, especialmente en la reducción de los tiempos de tránsito y envío. Un envío de mercancías se somete a una media de 30 inspecciones. Ante cualquier error o falta de documento, el transporte será detenido, con el consiguiente perjuicio para la empresa. La Blockchain simplifica esos trámites y reduce estos impedimentos.
También ha revolucionado el mercado de la energía eléctrica, ya que va a permitir asignar de manera ágil los activos de generación al punto de consumo, estableciendo una jerarquía de prioridades. Todo ello va a suponer una red global donde la eficiencia energética va a dar un salto cualitativo.
¿Cómo puede ayudar a los fabricantes? Ventajas de la Blockchain
La principal ventaja es su capacidad para construir sobre ella multitud de utilidades que requieran de una tecnología que le aporte las características anteriormente mencionadas, pudiendo aunar y simplificar la mayoría de herramientas actuales de gestión.
La seguridad e integridad que aporta mejoraría la gestión de registros y datos (Big data), la fluidez de la información, así como la protección de la propiedad intelectual.
En el sistema productivo, proporcionaría en tiempo real el origen y calidad del suministro de materias primas, información cualitativa sobre la transformación del producto en todas sus etapas de fabricación y una auditoria clara y visible en tiempo real del estado de nuestras máquinas (smart factory).
Como ejemplo práctico, imaginemos tener conectada la Blockchain entre los sistema ERP y el de los proveedores de repuestos. Esto permitiría a máquinas conectadas al IoT (internet de las cosas), realizar los pedidos de repuestos y, combinado con el análisis predictivo y prescriptivo, podría revolucionar el mantenimiento industrial.
Son también numerosas las ventajas a nivel de gestión y optimización de la calidad y seguridad de los procesos internos productivos:
- Mejora de la eficiencia en procesado de la información
- Automatización de las tareas
- Producción flexible y escalable
- Mayor calidad y eficiencia operacional de la producción
- Uso eficiente de la energía y la materia prima
- Reparación remota
- Mayor seguridad para el trabajador
- Reducción costes
- Mayor ROI
Esta eficiencia operativa elimina prácticamente la falta de conformidad del producto, evitando costes asociados, aumentando la satisfacción del cliente y mejorando la imagen de la marca.
En el sector cerámico, la protección de los derechos de autor ha sido siempre muy delicada. La inmutabilidad y trazabilidad de la cadena va a permitir una identificación inteligente, basada en las características de la estructura del material cerámico generadas durante el proceso de sinterización. Estas características de la estructura son únicas, al igual que lo es una huella digital, por lo que a través de un código QR se podría trazar cada pieza fabricada, evitando copias.
Conclusiones
Es indudable que el Blockchain puede aportar valor empresarial, ya que nos ofrece soluciones en los ámbitos más primordiales.
Pese a que esta ingeniosa tecnología no es excesivamente compleja, sí lo puede llegar a ser el aplicarla a gran escala, por lo que la debemos rodearla de un plan estratégico que entienda las necesidades del proyecto.
Sin duda, en los próximos años veremos si la Blockchain ha supuesto la revolución industrial que promete. En cualquier caso, “nada es más poderoso que una idea a la que le llega su momento”.
Responsable de I+D+i de Euroarce (Grupo Samca)