Habitualmente en esta sección introducimos ideas que, si bien tienen un vínculo con la cerámica, intentan ir un poco más allá de lo que consideramos un uso habitual de este noble material.
Sin embargo, en esta ocasión, volvemos a nuestro proceso para ilustrar una técnica conocida ya desde hace muchos años en el sector pero que, sin embargo, nos sorprende en su evolución tecnológica haya una solución tan apropiada para nuestro tiempo.
Es un momento compulso, en el que se pone en duda la seguridad para la salud de los operarios que manipulan soluciones para encimeras “in situ”, debido a las emisiones en forma de polvo que se producen lógicas de procesos de corte, pulido, etc.
Soluciones de este tipo, alineadas con la tendencia tecnológica de prefabricado, además de resultar muy eficientes tanto en tiempo como en aprovechamiento del material, se postulan como ideales debido a la emisión nula de partículas, significando una garantía absoluta para la salud y una forma muy sostenible de llevar a cabo el trabajo.